El fenómeno del fútbol mundial: Lionel Messi. Sin duda alguna hablamos de un jugador completo con doce años de carrera impecable. Acostumbrado a ganar y destacando entre la élite de la élite. Es una bendición para los hinchas del fútbol internacional. Por ahora es un jugador insuperable porque tiene una visión de juego muy precisa.

Un talento descomunal

Lionel Messi es un maestro cuando emerge de la banda derecha en diagonales que le permiten llegar al área a una alta velocidad, lo que lo convierte en un peligro para los defensores rivales. Tiene una habilidad con el balón que recuerdan a Maradona y su hambre de gol le permite hacer jugadas de memoria con sus compañeros.

Su virtud de jugar de memoria le permite divertirse mientras realiza su juego. El Barcelona no despliega un fútbol atractivo cuando el argentino está ausente ya que Messi elabora jugadas rápidas que le permite a sus compañeros realizar un fútbol vistoso. Se consagró como el mesías del fútbol durante la era Pep Guardiola en el Barcelona.

Demostró un juego espectacular fundamentado en el compromiso con su club. Realizando jugadas alucinantes. El equipo jugó de forma espléndida entre la enfermedad de Tito y el fracaso del Tata Martino, de esta forma Messi se convirtió en el líder del Barcelona FC. Junto a Neymar y Suarez forma un tridente en ataque que es temido por la defensa de los equipos rivales.

La evolución de su juego

Con el paso de los años el estilo de Messi ha experimentado una tremenda evolución futbolística. Ahora el ariete argentino se dedica a jugar fuera del área, distribuyendo balones y organizando las jugadas con su mentalidad precisa. Es un jugador con más precisión en el pie y con más capacidad para generar juego ofensivo después de tres cuartos de cancha